A veces los diseños de filtros de agua más simples pueden ser los mejores
Esta es probablemente mi forma favorita de filtrar el agua, sólo por la simplicidad que ofrece. Cuando hay mucha agua disponible, utilizo un producto llamado Sawyer Squeeze. Este método no tiene nada de sofisticado. Llenas una bolsa con agua sucia, enroscas el filtro, como si pusieras una tapa a una botella, exprimes el agua de la bolsa a través del filtro y la introduces en tu vejiga o botella. Y ya está. Fácil, muy ligero (3 onzas), y eficaz. Otro filtro muy similar es un sistema de gravedad. Es más o menos el mismo concepto pero sin apretar. Tienes una bolsa sucia que se llena con agua sucia. Hay una manguera que se une a la parte inferior de la bolsa que conduce a un filtro. Con la fuerza natural de la gravedad, el agua fluye a través del filtro a otra manguera (limpia) y a tu vejiga o botella. Es un sistema fácil y sencillo. El único inconveniente de estos dos filtros es que no puedes dejar que se congelen con exceso de agua en su interior. Si lo haces, el filtro se agrietará y dejará pasar los contaminantes. Una manera fácil de remediar esto es simplemente sacudir el agua restante del filtro y ponerlo en tu saco de dormir contigo.
22 de junio de 2018
Escrito por: Josh Kirchner, artículo completo en gohunt.com
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