Katie Spotz, plusmarquista mundial, correrá la ruta Ohio to Erie Trail para financiar proyectos de agua potable en Uganda

Cuando Katie Spotz corre, piensa en todo y en nada a la vez. Examina su cuerpo mientras avanza a saltos. ¿Respira profundamente desde el vientre? ¿Su postura es recta? ¿Está suficientemente hidratada y alimentada? ¿Está cómoda? ¿Tiene rozaduras? Las preguntas le rondan por la cabeza a cada paso que da.

En todo momento se concentra en sus pies. Golpea el suelo uno tras otro, siguiendo el ritmo de la naturaleza y los transeúntes que pasan zumbando en su periferia. Su cabeza permanece despejada. Los primeros 10 minutos de una carrera son siempre los más duros, dice, pero una vez que empieza, terminar es mucho más fácil.

"Siempre he pensado que hay que estar motivado para empezar, y ahora creo que empezar es lo que te hace sentirte motivado para continuar", afirma. "La motivación se produce por el movimiento, no por el estancamiento".

El pasado mes de septiembre, Spotz corrió 138 millas a través de Maine, donde vive actualmente, convirtiéndose en la primera persona en completar ese trayecto. Un mes antes, se convirtió en la primera mujer en correr sin parar por Vermont, recorriendo 74 millas en 13 horas. Y dos meses antes, se convirtió en la primera mujer en correr 62 millas sin parar a través de New Hampshire, terminando en poco más de 11 horas.

Si desea más información sobre la iniciativa RUn4Water de Spotz, haga clic aquí.